FAMCAL defiende el proyecto de regulación micológica de Castilla y León realizada a través del programa Micocyl
COMUNICADO - La Federación de Asociaciones Micológicas de Castilla y León (FAMCAL) representa a través de las asociaciones que la componen a miles de aficionados a los hongos.
En una clara labor de dignificación de la micología, estas asociaciones micológicas llevan años instruyendo a la sociedad en el conocimiento de las setas silvestres, destacando las cualidades gastronómicas de algunas y la toxicidad de otras, advirtiendo en este sentido sobre el alto riesgo que supone su uso gastronómico y comercial sin ningún tipo de control.
Precisamente estas cualidades gastronómicas son las que han convertido a las setas en un ingrediente cada vez más apreciado en la cocina, provocando como consecuencia una demanda creciente que nos ha llevado a un aumento progresivo de los recolectores en general y especialmente de recolectores con fines comerciales.
Entendemos que este potencial micológico pueda ser un recurso para el desarrollo económico en zonas necesitadas de ello (encauzando su comercialización por los canales adecuados y con unos controles sanitarios que garanticen máxima seguridad) pero no entendemos que predomine una visión mercantilista de los hongos y por eso creemos que su explotación no debería hacerse a cualquier precio.
Los aspectos gastronómicos, económicos o sanitarios son solo algunos de los que hay que considerar. Nuestra responsabilidad pedagógica nos obliga a destacar sobre todo, el papel fundamental que los hongos tienen en la naturaleza, en cuanto que son seres vivos integrados en una realidad muy compleja con múltiples relaciones interdependientes en los hábitats dónde viven. Por tanto ese marco regulador en el proceso de producción y comercialización, también y sobre todo, debe ampliarse para que quede garantizado la permanencia y sostenibilidad del recurso y de los bosques productores del mismo.
La postura de FAMCAL es favorable a una regulación que en la situación actual de recolecciones masivas se impone como ineludible. Desde los inicios del proyecto MYAS hasta el actual por parte de MICOCYL, FAMCAL ha colaborado con la regulación pública realizada en los Montes de Utilidad Pública. En este sentido hay que destacar la importante repercusión y beneficios que actualmente el programa MICOCYL genera sobre el micoturismo y sobre la población local, sin olvidar los posibles beneficios que se podrán generar con el valor añadido de los hongos a través de programas de financiación europeos.
Pero no solo debe regularse el proceso productivo. Lo que necesita el recurso micológico es una efectiva Ley Micológica que tenga en cuenta a todos los sectores interesados en la regulación y que armonice intereses medioambientales y económicos. Por nuestra parte y desde la certeza que nos proporciona la ciencia, creemos que una política medioambiental responsable debería tener como objetivo prioritario defender el valor ecológico de los hongos silvestres por encima de los demás intereses.
En resumen creemos que a los hongos es necesario primero conocerlos y después valorarlos en todos sus aspectos. Desde FAMCAL, los micólogos ofrecemos nuestros conocimientos y pedimos que se tengan en cuenta a la hora de dictar normas reguladoras micológicas.